Aunque parezca increíble Hugh Hefner anda ultimando los preparativos para su nueva residencia. Está confirmado que el magnate del erotismo abandonará definitivamente su díscola mansión…Pero sólo cuando alguna conejita le cierre los ojos y se lo lleven al Westwood Memorial Park de Los Angeles, dónde ha comprado el nicho vecino al de Marilyn Monroe… No sería de extrañar que entre sus últimas voluntades también haya pedido que le entierren con unas cuantas pastillas azules en el bolsillo…por lo que pueda pasar!
Más allá de lo cómico del asunto, subyace el hecho de que Hefner, en el fondo es un sentimental y le debe a Marilyn el haber cumplido su excéntrico sueño gracias en parte al cuerpo de ella, que fue la primera piedra del imperio. No en vano, Marilyn fue la portada del ejemplar nº1 de Playboy, cuando Hefner ni siquiera tenía dinero para sacar el segundo. El éxito fue tan arrollador, que en fin, aquí estamos hablando de ellos.
Cuando sea, esperamos que descanses en paz, Hefner.